Con gran alegría y entusiasmo, una delegación de 160 jóvenes del Movimiento Hijos de
Hogares Nuevos participó en el Jubileo de los Jóvenes 2025, celebrado en el marco del
Año Jubilar convocado por la Iglesia. Este evento, que reunió a más de un millón de
jóvenes provenientes de distintas partes del mundo, fue un espacio privilegiado de
encuentro, fe y comunión.
Para los Hijos de Hogares Nuevos, este Jubileo fue mucho más que una simple
participación. Fue la oportunidad de seguir irradiando la gracia vivida semanas antes
durante el XI Congreso Internacional en Granada, España. Con el corazón aún
encendido por aquella experiencia, los jóvenes compartieron con alegría la riqueza
espiritual, formativa y fraterna del Congreso, convirtiéndose en testigos vivos de una
espiritualidad joven, alegre y comprometida.
Durante los días del Jubileo, nuestra delegación se integró activamente en las
celebraciones litúrgicas, momentos de adoración, talleres formativos y actividades
misioneras, dejando huella con su testimonio de unidad, servicio y fe.
Uno de los momentos más impactantes del Jubileo fueron las jornadas de confesiones,
donde más de mil sacerdotes ofrecían el sacramento de la reconciliación, dando
testimonio del rostro misericordioso de Dios. También destacó el profundo silencio que
se produjo durante la adoración eucarística, un instante de unidad espiritual que
conmovió profundamente a todos los presentes.
El entusiasmo fue aún mayor al vivir estos momentos junto al Papa León XIV, cuya
cercanía y palabras encendieron en los corazones de los jóvenes un deseo renovado de
seguir a Cristo con radicalidad y alegría.
La presencia de los Hijos de Hogares Nuevos no pasó desapercibida: su canto, su
alegría y su fervor contagiaron a muchos otros jóvenes, que se sintieron llamados a vivir
una fe más profunda, comunitaria y comprometida.
Agradecemos al Señor por habernos permitido ser parte de este momento de gracia y
renovación. Los frutos que nacieron en Granada siguen creciendo y multiplicándose, y
el Jubileo de los Jóvenes ha sido una confirmación de que esta Obra sigue caminando
con la Iglesia y para la Iglesia.
Confiamos en que lo vivido nos impulse a seguir caminando, con renovado ardor, hacia
la próxima cita en Salto, Uruguay, en 2027.
