En una sencilla y solemne ceremonia, hoy 28 de setiembre, se trasladó el cuerpo del padre José Zilli desde el cementerio de Aarón Castellanos a la Capilla Nuestra Señora de la Merced en la Sede Central del Movimiento Hogares Nuevos Obra de Cristo. En dicha ceremonia nuestro fundador Padre Ricardo Facci, le dedicó las siguientes palabras: «Pedimos por segunda vez, de algún modo, al colocar aquí el cuerpo del Padre José, su presencia entre nosotros, físicamente como lo vivimos antes de aquel 31 de enero de 2008, pero sabiendo que contamos con él, con su fuerza, con su inter sesión, con aquello que nos pueda acompañar también desde el cielo». «Por eso la iglesia nos ha permitido tenerlo como Siervo de Dios, y más allá de los signos que nos pueda enviar desde el cielo, tenemos esa garantía y esa seguridad». «En esta ceremonia tan sencilla tan simple que hemos tenido como fue su vida siempre sencilla siempre simple, un pasar casa desapercibido, nosotros recibimos en el corazón, este mensaje grande de Dios, de que todos vamos a pasar por esta situación de muerte, pero todos estamos llamados también a la vida con mayúsculas». «Agradecemos muchísimo la presencia de monseñor Obispo Gustavo Help de la diócesis de Venado Tuerto, quien nos ha acompañado en este momento, también la presencia de todos ustedes que sienten al padre José Zilli, y de un modo muy especial, la ayuda concreta que hemos recibido de la comuna de Aaron Castellanos, y también agradecemos a Daniel Sales quien ayudó mucho en este proceso del traslado». «Sigamos rezando y difundamos la devoción al Padre José Zilli». «Ya a habido varios signos de su inter sesión. Y pidamos que interceda por nosotros en la gracia grande que es la gracia de la conversión. El obispo de Venado Tuerto, Monseñor Gustavo Help, le dedico una homilía, donde hizo referencia justamente al nombre del Padre Zilli, José, quien lleva el nombre justamente del esposo de la Virgen María y padre de Jesús. «Dios nos ama a tal punto que Jesús quiere hacerse uno de nosotros. En Jesús, Dios nos abre de par en par su corazón, en Jesús nos invita a acogerlo a recibirlo». «María y José vivían en la esperanza de que Dios desde siempre comprometió su corazón en salvarnos. Le abrieron de par en par sus vidas y a tal punto se la abrió María a Dios, que en ella Jesús se hizo carne». Dicha homilía hizo mención a la vida Jesús desde su niñez hasta su muerte. Para finalizar, Padre Ricardo Facci le dedico unas palabras a tal ceremonia.
Fuente: Prensa HN